Ya sea por costumbre, creencia o diversión, algunas de nosotras hacemos toda clase de ritual para recibir el año nuevo y que éste traiga abundancia, amor y éxito en todos nuestros proyectos.
Cuando la cuenta regresiva comienza para un nuevo año todos nos sentimos más positivas, más optimistas. Es por ello que te presentamos 6 rituales de fin de año, fáciles de hacer y muy efectivos.
El año, haya sido bueno o malo, está por acabar y tenemos ante nosotros 12 meses nuevos para hacer todo lo que tenemos en mente.
Baño para eliminar malas energías. Es un ritual básico para eliminar las malas energías que nos bloquearon en los últimos meses. Para realizarlo debes preparar una infusión con 7 rosas blancas, ruda, romero y algunas semillas de comino. Toma un baño normalmente, luego pon esta infusión en la bañera y déjala reposar durante 5 minutos. Finalmente, sécate como lo hacemos normalmente.
Limpia tu hogar. Un día antes de la llegada del año nuevo, es decir, el 31 de diciembre, es importante hacer una buena limpieza en nuestro hogar. Puedes aprovechar para eliminar todo lo que no utilizas. Esto te permitirá dejar atrás lo malo para que pueda resurgir lo bueno e iniciar con buenas energías.
Lentejas. Coloca 12 semillas de lenteja en el bolsillo de cada miembro de tu familia. Esto se realiza la noche de Año Nuevo para asegurar la abundancia y dinero. También puedes preparar un poco de lentejas, las pones en el centro de tu mesa y el 01 te comes una cucharada.
Agarrar un billete el último minuto del 31 de diciembre. Poner un billete en la planta del zapato o sostenerlo en tu mano el último minuto del año, es un ritual para que no falte el efectivo en este nuevo año.
Confía en el elemento fuego. Unos minutos antes de medianoche escribe en un papel tus deseos para el próximo año, dóblalo y cuando sean las doce quémalo en la llama de una vela o una hoguera para que se cumplan.
¿Estás cerca del mar? Salta olas
Si tu plan de fin de año tiene el mar de fondo corre hacia él. La tradición marca saltar siete olas justo a media noche y pedir con cada salto un deseo.